Sentado en el autobús, ojos medio cerrados, prados desolados, sonidos horrorosos enlatados. Escuchando a LaMala y mirando al frente, hacia la nada, descubriendo laberintos que siempre allí estuvieron pero nunca se dejaron ver (o al menos eso me hicieron creer). Me libero, poco a poco voy dejando el terreno, me elevo del suelo y contemplo la mundana tierra con supuesto recelo... Rimas simplonas para hacer la vida menos dura y poco más acogedora.
Y llegué a casa a eso de las 3 y cuarto...Yo lo he conseguido ¿Tú?
1 comentario:
cuidado joven..no dejes qe te hagan descubrir nada..descubrelo tu mismo..y descubre tambien qe a veces los pensamientos se vuelven cosas..no dejes de crear fabricas de pensamientos abundantes y positivos...para qe las cosas qe produzcan puedan servirte a ti y al mundo qe te rodea ..descubrete a ti mismo tu eres el creador de lo qe ves como materia.
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